Andy Hargreaves: maestros para la sociedad del conocimiento

1 abril 2009 de Fernando 8 comentarios

El lunes pasado estuve en la videoconferencia con Andy Hargreaves organizada por el Consejo Nacional de Educación (CNE). Una gran iniciativa que no es muy costosa pero de gran impacto: tener especialistas de talla mundial compartiendo sus reflexiones con especialistas y educadores peruanos.

Hargreaves comenzó haciendo mención a la importancia del maestro. «El maestro es más poderoso que el ministro de educación. Cuando entra a su aula, y cierra la puerta tiene más influjo de lo que otros actores o elementos del sistema educativo puedan lograr.»

Hargreaves presentó luego , de manera sucinta, tres dimensiones de la enseñanza como práctica: la dimensión técnica, la intelectual y la emocional. Probablemente, la dimensión emocional es la menos considerada. Hargreaves fue muy enfático sobre el hecho de que enseñar es siempre unapráctica que involucra emociones. Ya sea que el maestro comunica su pasión por lo que enseña, o transmite todo lo contrario, siempre es una acción emocional. Como maestros, siempre estamos involucrando nuestras emociones. Si bien no hubo mucho tiempo para desarrollar, cada una de las dimensiones del quehacer docente es claro que cada una de ellas plantea una serie de retos a los que diseñan las políticas, en la medida en que implica voluntad política, tiempo y recursos para crear las condiciones que permitan a los maestros desarrollar su trabajo y apoyar más efectivamente a los estudiantes a lograr aprendizajes significativos.

Uno de los temas claves abordados por Hargreaves fue la importancia del trabajo colaborativo, de cara a la etapa más desarrollada del profesionalismo de los docentes que él llama «extended professional» (o la etapa del profesional ampliado). En este contexto de globalización no hay forma de que los maestros desarrollen su trabajo si no son capaces de estimular la creatividad, la resolución de problemas, el mejoramiento continuo. Se necesita avanzar hacia comunidades profesionales en las que los maestros sean capaces de compartir sus saberes y crear una suerte de «inteligencia colectiva». Hargreaves sostiene que los maestros pueden ser «catalizadores de la sociedad del conocimiento» si son capaces de promover un aprendizaje cognitivo más profundo, desarrollando capacidades para el cambio y asumir riesgos.

Todo esto plantea grandes retos a la profesión docente, sobre todo porque implica aprender y enseñar en formas distintas a las que nosotros mismos hemos aprendido en nuestra formación. Exige transformaciones en la cultura escolar, mayor flexibilidad y nuevas formas de relación. Sin embargo, no son tareas imposibles. La experiencia de las comunidades o grupos de interaprendizaje que se han desarrollado en diversos proyectos y programas muestran que los maestros están mucho más dispuestos de lo que uno cree a trabajar con los colegas, a buscar juntos soluciones para los problemas cotidianos del aula. Hay que seguir apoyando y promoviendo estas iniciativas.

Hay algunos textos del Prof. Andy Heargraves que están en castellano y que sugerimos revisar: Hargreaves y Fink. «Estrategias de cambio y mejora en educación»; Hargreaves. «El cambio educativo: entre la inseguridad y la comunidad«; o la entrevista en la revista Docencia nro 27 del Colegio de Profesores de Chile.