Intriga Personal

“Me apasiona la enseñanza; disfruto, quizá de un modo narcisista, induciendo en los demás el interés por problemas que me intrigan personalmente” Jerome Bruner


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Ecos del CADE de Educación 2010

(c) IPAE

La reunión del CADE de Educación del pasado 29 de abril tuvo alguna repercusión en los medios: algunos destacaron la intervención del viceministro Vexler, que señaló que los avances que se han visto en la última evaluación censal ha ayudado a aumentar la autoestima de niños, padres y maestros. Vexler también señaló que es necesario poner más énfasis en la acción: “Menos estudios, menos evaluaciones –salvo cuando sean necesarias-, superemos las trabas de tanto burócrata que no nos deja avanzar”, tal como se reseña en una fuente de noticias. Otros medios pusieron más enfasis en los aportes de expertos internacionales que vinieron a compartir sus reflexiones, como la Dra. Emiliana Vegas, del Banco Mundial, co-autora de un estudio que ha analizado el impacto de la ampliación de la atención temprana de infancia en América Latina y el Caribe y su efecto en la escolaridad («La promesa del desarrollo en la primera infancia en América Latina»). Según Vegas, la inversión en programas de atención a la primera infancia es la la que mayores retornos tiene, en términos económicos, que cualquier otra intervención ya sea en educación básica, educación para el trabajo o capacitación de la fuerza laboral. Fue también destacada la intervención de Marcelo Cabrol, del BID, que insitió que el siglo XXI deberá ser el siglo para terminar con la inequidad, lo cual no se podrá cumplir si no se consiguen mejores maestros a partir de nuevos liderazgos.

(c) IPAE

Personalmente, me pareció muy interesante el discurso de apertura de Jorge Yzusqui, presidente de IPAE y miembro del Consejo Educativo Nacional (CNE), quien fue muy enfático sobre la urgencia de las reformas en educación para alcanzar el desarrollo y la competividad del país: «la competencia den futuro será entre los sistemas educativos de los países». Asimismo, en torno a la necesidad de institucionalizar los cambios sugirió que «concentremos talento en el sector educativo del Estado» de la misma manera como en el algún momento se apostó por mejorar sustancialmente la calidad profesional de sectores tales como Economía y Finanzas, SUNAT, Aduanas.


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Empresarios, empresa y educación

Es importante que los empresarios se ocupen de la educación. Ésta ha sido una de las conclusiones de la reciente Conferencia Anual de Ejecutivos (CADE) en Arequipa, en la que empresarios como Dionisio Romero como el ministro de Economía, Luis Carranza, coincidieron en que el país puede seguir creciendo unos años más al ritmo que lo ha hecho ahora, pero si queremos dar un salto cualitativo, y llevar al Perú a las grandes ligas, tenemos que invertir hoy en educación.  Esto mismo ha reafirmado Rolando Arellano en su columna de El Comercio, que señala que no leer es quedarse atrás: «No leer, para el Perú de hoy, significa aceptar que el crecimiento de los últimos años es solamente un accidente en nuestra historia, y que así será imposible un desarrollo de largo plazo.»

Creemos que la participación de los empresarios y la empresa privada es importante, imprescidible. Necesitamos que los empresarios se comprometan en esfuerzos integrales y estratégicos, no sólo en acciones filantrópicas, sobre todo si se quiere que los esfuerzos (y los recursos empleados) sean eficientes y sostenibles. En los EE.UU., Diane Ravitch advierte sobre las visiones o soluciones simplistas planteadas por algunos representantes del sector privado (ver la entrada de su blog, «¿Por qué los líderes empresariales no deben estar en el asiento del conductor»). Del mismo modo, Mike Smith, en el blog de Change.org señala, comentando una afirmación del Secretario de Educación de los EE.UU. en que sugiere que los directores de escuela deben ser más como CEOs (gerentes). Smith concluye: «Los niños no son productos, y pedir que los directores se conviertan en gerentes es atemorizante».

Se trata, en conclusión, de cumplir c0n lo que señala el Proyecto Educativo Nacional (PEN) en su 6to objetivo estratégico: promover uan sociedad educadora en la que los empresarios, al igual que otros actores de la sociedad civil, contribuyen a la mejora de la calidad y equidad de la educación.